¡El mejor edil del mundo!

Luego cruzó el pasillo, bajó al sótano y mató al prisionero. "Rara forma de proceder del edil del ayuntamiento"
- ¡Ve con Dios!,  le dijo de forma firme y contundente. 
Siempre se mostró campechano y cercano con la gente, esa acción fue en defensa de sus principios y por salvaguardar toda la innovación de su ciudad. Muchos fueron los esfuerzos y más los continuos reconocimientos.
Nadie tiene derecho a romper el encanto de una ciudad, donde lo que prevalece es la compostura y el buen hacer.  

Miren E. Palacios
Bilbao, 21 de marzo de 2014